3 características que certifican que soy Amigo
ALGO MUY DIFICIL DE ENCONTRAR
La Biblia señala que UN AMIGO VALE MÀS QUE UN HERMANO. Proverbios 18:24
Se dice que quien encuentra a un amigo, encuentra un tesoro.
También en Mateo 13: 45-46 nos habla del mercader que encontró una perla y considerando su gran valor vendió todo lo que tenía y la compró. Aunque aquí no nos habla de los amigos voy a tomarlo como ejemplo.
Ahora bien, la primera parte de Proverbios 18 dice algo que a veces obviamos; El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo.
Tenemos que reconocer que somos egoístas cuando se habla de este tema “amigos” decimos: Yo no tengo amigos, mis amigos son muy pocos. ¿Amigo? ratón del queso.
Jamás consideramos si “yo” soy un verdadero amigo, o que tan amigo soy de los demás, cómo podría a medida que pasa el tiempo mejorar mis actitudes, cambiar mi manera de pensar para lograr ser un mejor amigo.
En los años que tengo de vida, que no son pocos, puedo asegurar, que tener amigos verdaderos es haber encontrado un tesoro de mucho precio. A veces tienes que vender mucho de lo que posees; como el mercader, para adquirir esa amistad, para retenerla para toda la vida. Y no se trata de dinero, ni de adulación, tampoco manipulación o fingimiento.
Veamos 3 características que otros deberían ver en nosotros para considerarnos sus amigos.
AMOR INCONDICIONAL: Jesús, unas horas antes de ser crucificado, dijo: uno de ustedes ha de entregarme: y sus amigos (así los había llamado Él), le preguntaron ¿quién es Señor? El respondió, a quien yo mojare el pan en la copa, y lo dio a su amigo Judas… Se dice que este acto, para la cultura judía, mojar el pan y darlo en la boca a su amigo, decía sin palabras: cuanto te amo!!
SE DESPOJÓ DE TODO: Jesús, dejó su gloria, sus privilegios, su lugar de seguridad, se humilló, se hizo tan igual a nosotros para, ser nuestro amigo y entregó lo más valioso de Él, su vida. Jesús, sabía lo que decía cuando exclamó… No hay mayor amor que este, que alguien entregue su vida por sus amigos.
SU AMIGO DAVID FUE PRIMERO QUE ÉL: Jonatán, amigo del rey David. Siendo el sucesor de su padre Saúl rey de Israel, en ningún momento pensó con egoísmo, envidia o avaricia sobre su verdadera posición como hijo. Saúl le dijo a Jonatán, mientras David viva, ni tu estarás firme, ni tu reino. Eso no le importaba, Jonatán arriesgó su vida, renunció a su reinado y le dijo en una ocasión a su amigo: Jehová esté entre tú y yo para siempre. Y esas palabras nunca las olvidó David.
Entonces reflexionemos, hay muchas más características, que podría mencionar para ser un buen amigo; pero estas 3 son imprescindibles: amar sin esperar aún nada bueno a cambio, dar todo lo que podamos y renunciar a lo personal, a lo que me conviene o me gusta, antes, pensar en el otro.
SEAMOS AMIGOS!!
Expositora de la Palabra:
Eliasib Guerrero Chacín